José Tena, director del proyecto COLMED: “El principal camino para poner en valor las medusas como recurso marino es profundizar en la investigación como potencial fuente de colágeno de alta calidad”

Lunes, 12 Mayo 2025
Entrevista a José Tena Medialdea, director del proyecto COLMED.

COLMED es una innovadora iniciativa que busca potenciar el uso de medusas como nuevo recurso marino en el litoral mediterráneo español. La investigación y la colaboración del sector pesquero son los dos pilares del proyecto. “Queremos lograr un procedimiento sostenible desde la localización de ejemplares en el mar hasta el último paso con el sector industrial”, recalca José Tena Medialdea, director del proyecto, que añade que “para el sector pesquero supone una fuente económica adicional a su actividad en lugar de significar pérdidas por la presencia de medusas en nuestras costas”.
 

Vuestro proyecto busca potenciar el uso de medusas como nuevo recurso marino en el litoral mediterráneo español. ¿Cómo vais a lograrlo?
El principal camino para poner en valor las medusas como recurso marino es profundizar en la investigación como potencial fuente de colágeno de alta calidad y buscar la implicación del sector pesquero para valorizar su presencia en las costas evitando considerarlas como una especie “peste” o en términos negativos. Todo ello para conseguir un procedimiento sostenible desde la localización de ejemplares en el mar hasta el último paso con el sector industrial.

 

¿Cuál es el potencial de las medusas como recurso marino, además del colágeno?
Además de constituir un componente clave en las redes tróficas marinas, las medusas tienen un gran potencial en diferentes áreas biotecnológicas como cosmecéutica, nutracéutica o biomedicina. El colágeno de medusa es utilizado como biomaterial debido a su alta biocompatibilidad, el bajo riesgo de respuestas alérgicas y un mínimo potencial de transmisión de enfermedades zoonóticas, posicionándolo como una alternativa más segura y sostenible en comparación con los colágenos tradicionales de mamíferos. También, en la industria alimentaria, las medusas son un preciado bocado en los países asiáticos.

 

Hablamos de un proyecto cuya aplicabilidad tiene unas derivadas económicas claras. ¿Cuáles serían y para qué sectores?
La incidencia del proyecto para el sector pesquero supone una fuente económica adicional a su actividad en lugar de significar pérdidas por la presencia de medusas en nuestras costas. Es importante matizar que las proliferaciones de medusas generan daños a la industria pesquera al obstruir y dañar las redes. Además, COLMED pretende conectar al tejido empresarial español formando una red de actores interesados en la valorización de medusas.

 

¿En qué avances se están traduciendo las principales actuaciones del proyecto? ¿Podéis adelantarnos algunos logros?
En estas primeras fases del proyecto ya se han iniciado acciones en relación con los tres objetivos clave del mismo, implicando al sector pesquero artesanal para la obtención de ejemplares de medusas y registro de presencia/ausencia de medusas en las zonas pesqueras. La respuesta de los agentes interesados está siendo francamente muy positiva. Se ha avanzado en las técnicas de extracción de colágeno, fundamental para la creación de biomateriales. Por otra parte, desde el inicio del proyecto se trabaja en la sensibilización a la sociedad sobre medusas, su valor y protección del medio ambiente marino.

 

Buscáis crear una Red de Explotación y Gestión del Recurso (colágeno). ¿Qué finalidad tendrá está plataforma?
El objetivo fundamental de la plataforma es la consolidación de un protocolo que permita poder aprovechar este recurso de una manera rápida y eficiente donde las medusas, principalmente capturadas de forma accidental (bycatch) por los pescadores, puedan ser utilizadas. Uno de los principales desafíos a los que nos enfrentamos es optimizar el uso de este recurso, ya que los pescadores, al capturar accidentalmente grandes cantidades de medusas, a menudo las dejan descomponerse durante varios días, utilizando este método como una forma efectiva de desenredar y limpiar las redes de medusas. Por lo tanto, una gestión eficaz será crucial para aprovechar todo el potencial de las capturas incidentales de medusas mediante la cooperación entre científicos y pescadores.

 

Las medusas son percibidas por gran parte de la población como una especie amenazadora, por las picaduras que sufren los bañistas. ¿Trabajáis en el marco de COLMED para revertir esa imagen?
Este aspecto es clave en el desarrollo del proyecto ya que las medusas no sólo son consideradas como animales dañinos o amenazadores para el sector turístico por su incidencia directa en las playas en el periodo estival, sino que la sociedad las considera una especie “peste” y carente de valor. Así pues, es importante que demos una visión realista de lo que realmente son las medusas, su importancia en el equilibrio de los ecosistemas marinos donde juegan un papel fundamental, su modo de vida para que se comprenda que su utilización como recurso puede y debe ser sostenible, etc., en definitiva, que estos animales marinos no son tan malos como parecen y que los seres humanos debemos conocerlos bien para saber lo que podemos hacer con ellos.

 

Contáis como socio del proyecto con el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC). ¿Qué rol desempeña en la iniciativa?
El Institut de Ciències del Mar cuenta con un histórico de muchos años de investigación de este grupo de animales y posee gran experiencia y conocimiento de interés en el proyecto. La mayor parte de sus actividades se circunscriben a Cataluña donde coordinan actividades relacionadas con las cofradías de pescadores catalanas, formación y capacitación de pescadores artesanales y un papel clave en la evaluación de la dinámica poblacional de medusas, principalmente utilizando la ciencia ciudadana, y a través del proyecto “Alerta medusas” de la plataforma de ciencia marina de referencia en España, Observadores del Mar.

 

Entre las entidades colaboradoras de la iniciativa hay varias cofradías de pescadores. ¿En qué se traduce esa colaboración?
Los pescadores son las personas que pasan la mayor parte de su vida en la mar y son quienes mejor entienden a primera vista el funcionamiento de este sistema, así pues, su participación en el proyecto radica en la detección y extracción del recurso, sin duda el primer paso de todo el proceso de utilización de colágeno de medusas.

 

Para concluir, ¿cómo valoráis la importancia de la colaboración del sector pesquero para lograr los objetivos del proyecto?
Fundamental y clave en la iniciativa. En el fondo los resultados del proyecto se traducen en beneficio de este sector y sin su participación y compromiso este recurso carecería de sentido.