MITICAP III: Implementación de medidas innovadoras de cooperación entre pescadores y científicos para una mejor gestión de la pesca artesanal con el objetivo de mitigar sus impactos en hábitats marinos sensibles

Temática: 
Eje 1.1 Innovación pesca
Icono IntemaresProyecto complementario de INTEMARES
Objetivos: 

 

Objetivo general:

Implementación de Medidas Innovadoras de Cooperación entre Pescadores y Científicos para una Mejor Gestión de la Pesca Artesanal con el Objetivo de Mitigar sus Impactos en Hábitats Marinos Sensibles.

 

Objetivos específicos:

1. Implementación de medidas innovadoras de mitigación de impactos de la pesca artesanal.

2. Aplicación de medidas innovadoras para reducir la pesca fantasma.

3. Campañas de sensibilización y revalorización del medio marino llevadas a cabo conjuntamente  entre pescadores y científicos.

4. Difusión del proyecto y de los resultados.

 

Descripción: 

El presente proyecto constituye la tercera fase de MITICAP, cuya primera y segunda edición fueron beneficiarias de la convocatoria 2017 y 2018 del Programa Pleamar, con objeto de mejorar e introducir medidas innovadoras de mitigación de los impactos generados por la pesca artesanal y la pesca fantasma sobre las comunidades bentónicas del Cap de Creus, colaborando estrechamente con los pescadores de Port de la Selva y Cadaqués.

 

Entre las medidas contempladas, se incluye la introducción de variaciones estructurales innovadoras en el trasmallo de langosta, la reducción del tiempo de calado de trasmallo mediante cebado innovador y la incorporación de materiales biodegradables en los artes de pesca (por ejemplo, nasas de pulpo, que presentan una elevada tasa de pérdida). Asimismo, se ha explorado junto a los pescadores la posibilidad de aprovechar parte del descarte como posible cebo para trasmallos de langosta y otros artes. Del mismo modo, se han consesuado medidas para incrementar la supervivencia de los organismos del descarte no aprovechable.

 

Con la finalidad de testar y modular la eficacia de las distintas medidas de mitigación propuestas, se llevaron a cabo pescas experimentales. Por otro lado, se realizaron  iniciativas innovadoras para reducir la pesca fantasma, como la recuperación de los artes perdidos en zonas de plataforma (> 50 m) mediante ROV. Con el fin de localizar los artes de pesca extraviados y recuperarlos antes de que su extracción con ROV resultara imprescindible, se incorporaron "boyas inteligentes" de última generación y localizadores acústicos.  

Resultados del proyecto
Resultados: 

Este proyecto refuerza la importancia de conectar el sector científico con el sector pesquero y trabajar en colaboración continua. En este contexto, se han celebrado diversas reuniones entre ambos colectivos de coordinación y evaluación de medidas.

 

El proyecto ha incluido la modificación de trasmallos para langosta acorde con el "Plan de Gestión de Langosta" de la Generalitat de Cataluña, añadiendo cebo a los artes con la intención de reducir el tiempo de calado de las redes. Asimismo, se incorporaron materiales biodegradables de última generación en 20 nasas de pulpo, colocando un trozo de cuerda vegetal en la puerta, con un tiempo de degradación bajo el agua de aproximadamente un mes. También se fabricaron dos trasmallos de algodón, cuyo tiempo de degradación es más lento, observándose que con este último material las especies de descarte sufrían menos daños y heridas que con nylon, aportándoles mayor probabilidad de supervivencia.  

 

Con estas acciones, se ha constatado que las redes de 2.5 de luz de malla capturaban menos by-catch que las de 3, sin disminuir la captura de especies de interés comercial, mientras que el cebado previo de las redes no presenta variaciones significativas en la captura de langosta, seguramente más influenciada por otros factores, como la localización del arte. A su vez, las nasas con puertas degradables sí resultaron eficientes, por lo que podrían utilizarse habitualmente en embarcaciones de artes menores. Por último, los trasmallos de algodón producen menores laceraciones en los organismos del by-catch, incrementando su supervivencia.

 

Por otro lado, en relación a las acciones vinculadas a los descartes, se observa que el descarte de los pescadores artesanales de la zona consiste mayoritariamente en pescado podrido y multitud de especies de invertebrados de nulo valor comercial en lonja. Este descarte obtenido (5 Kg) durante las pescas experimentales fue aprovechado para la preparación de cebo y para el enriquecimiento de abonos ecológicos (5 Kg totales de Astrospartus). Con respecto al descarte no aprovechable (porífera, cnidarios, briozoos y moluscos, equinodermos y crustáceos), se incrementó su supervivencia, mediante su mantenimiento en acuario o su inmediata devolución al mar. Como conclusión, se puede afirmar que la retirada de los artes de pesca antes de un temporal, así como un manejo adecuado de la fauna que compone el descarte a la hora de su retirada, puede resultar en una disminución del by-catch no deseado e incrementar la supervivencia del mismo en caso de devolución.

 

En total, se realizaron 96 pescas experimentales, 63 con trasmallos modificados con una malla más gruesa y 33 con trasmallos normales de malla fina. Respeto a los modificados para el cebado, se utilizaron en 12 de las 63 pescas y los trasmallos modificados con materiales biodegradables fueron usados en 15 ocasiones, proporcionando una mayor probabilidad de supervivencia por su mejor estado respeto al descarte recogido con redes de nylon.

 

Se efectuaron varias pruebas piloto para la extracción de artes de pesca mediante el uso de robótica submarina en las aguas del Parque Natural del Cap de Creus (prueba piloto de extracción de nasas), y en la piscina experimental del Instituto de Ciencias del mar (prueba piloto para la extracción de una red). Una vez terminadas las pruebas, se elaboró un protocolo de extracción para ambos artes de pesca y se pudieron recuperar en total cinco nansas de pulpo (aproximadamente unos 10 Kg).

 

Para la reducción innovadora de la pesca fantasma, se utilizaron seis boyas, una por cada pieza de redes tirada al mar en distintas profundidades, permitiendo localizar cada red en caso de pérdida de los cabos, mediante el protocolo de disparo de la sonda transponder.  Se realizaron cuatro jornadas de pruebas para enseñar al pescador a utilizar la sonda y el programa informático que permite disparar las boyas. Las boyas de recuperación SCATRI permitieron recuperar todas las redes de pesca perdidas –en total, se recuperaron siete en estas jornadas-. El sistema de recuperación SCATRI resultó fiable y efectivo para su uso con trasmallo o nasas. Por otro lado, se organizó una prueba piloto, empleando un hidrófono, un recibidor y los pinger para localizar redes extraviadas o que hayan perdido las boyas que señalizan las redes. En las cinco pruebas, las redes fueron localizadas.

 

En cuanto a las acciones de sensibilización, se realizaron seis pruebas piloto de extracción de artes de pesca, en las que participaron un total de 45 personas. Se calcula que, anualmente, se han recuperado más de un centenar de kilos de basura. En esta línea, se efectuaron pruebas piloto de empleo de robótica submarina (experiencia inmersiva) para sensibilizar a la población local sobre la importancia de los hábitats bentónicos para la conservación del medio marino. Por otro lado, se participó en la iniciativa de educación online conocida como “Somos Científicos y Científicas”, con la participación de 1.375 estudiantes provenientes de más de 68 centros educativos. A lo largo de los dos años de proyecto se celebraron 31 jornadas de divulgación.

Convocatoria de subvenciones: 
2019
Estado: 
Cerrado
Año de inicio: 
2019
Año de finalización: 
2021
Ámbito de actuación: 
Cataluña
Beneficiario: 

Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC)

Cofinanciado por: 
FEMP